Tal vez, en realidad lo que necesites es un
tratamiento, una medicina, etc. Para ayudarte en tu situación pero no una
adicción, que sólo empeorará las cosas. Por eso busca, en los más cercanos, en
tus amigos, tu familia, tus vecinos, los religiosos, etc.
Busca y
no te avergüences de tu vulnerabilidad, de tu pobreza y tu debilidad al haber
caído en este vicio, que de caer, cualquiera puede caer, pero para salir de él
es cuestión de triunfadores, como tú, pero no lo hagas sólo, para asegurar más
tu triunfo sobre de, busca ayuda.
Tal vez tengas que tocar cien puertas, pero no
te rindas, alguna se te tiene que abrir, tarde o temprano, no lo sé. Sólo busca
porque no estás sólo, y la persona que te ha de brindar su ayuda te estás
esperando, sólo hay que dar con ella. Busca y encontrarás.
Tal vez estés consciente de que lentamente te
estás matando y eso sea lo que estés deseando, porque piensas que a nadie le
interesas, y por lo tanto menos tú mismo, así que te da igual.
Pero de algo si podemos estar seguros, y es que
no nacimos por equivocación, sino porque estábamos en los planes de un poder
supremo y absoluto, el cual siempre está junto a nosotros, al que no le
interesan nuestros falsos criterios, o percepciones falsas, mucho menos
nuestros negros pecados. Sino que le interesamos nosotros como personas,
sintiéndonos feos o guapos, eso no importa, lo importante es que valemos mucho,
para DIOS, para el mundo, para el universo. No somos nada más un conjunto de
células y neuronas, ocupando un espacio, al que la tierra sostenga, el sol caliente,
y el viento abanique.
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