“Estase ardiendo el
mundo…” Dice santa Teresa de Ávila.
Con esta frase quiero continuar hablando de nuestro papel,
en medio de las barbaridades que se viven hoy. Mi objetivo repito, como en
hojas atrás, no es culparnos, sino concientizar, para que hagamos
correctamente, lo que nos toca hacer.
Actuemos con madurez y no andemos buscando quien tiene la
culpa, sino qué puedo o que podemos hacer para contrarrestar tanto peligro y
daño que existe en la sociedad, que está amenazando a nuestros seres queridos.

Existe una pandemia de droga, en todos los niveles, ricos y
pobres; chicos y grandes, ¿Dónde estábamos mujeres, que no percibimos esto, cuando
empezó a crecer? o es que, ¿fuimos cómplices de su crecimiento? No olvidemos
nuestra intuición y delicadeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario